“Estuve en la cama de un hospital y me dije: no sé si voy a regresar, ya ni sé si quiera regresar, pero me paro y sentí la adrenalina de cada clavados, que es nuevo para mí”, expresó en declaraciones a la prensa.
A inicios de abril pasado, durante un entrenamiento para el Campeonato Nacional, el jalisciense tuvo una mala caída en el agua y tuvo que pasar de urgencia a cirugía para corregir la fractura de piso de órbita ocular izquierdo.
“Siempre lo digo: no hay cosa mala que no ayude para bien”, compartió este lunes en el aeropuerto capitalino de camino a una escuela rural para dar una plática motivacional a los alumnos.
Manifestó que ve raro su cuerpo sin ninguna venda, debido a que antes de esa caída, tuvo que pasar a cirugía por una larga lesión en un hombro, por lo cual ahora está en un momento muy feliz de su vida.
Sánchez no compite desde los Juegos Olímpicos Río 2016, donde ganó medalla de plata, pero alista su reaparición y lo hará con un nuevo salto ornamental en su lista: el parado de manos con dos giros y medio hacia atrás, que es el de más alto grado de dificultad en su modalidad.
“Hay un reto nuevo y eso me ilusiona”, afirmó respecto a su participación en el Grand Prix de la FINA, programado del 23 al 25 de noviembre en Singapur.