El primer trimestre de 2023 fue complicado para el mercado bancario en Estados Unidos, luego del cierre de entidades especializadas en servicios para empresas de criptomonedas. Todo empezó con Silvergate Bank. Luego las autoridades intervinieron a Silicon Valley Bank, la entidad de las startups de tecnología, al considerar que no podía pagar sus obligaciones. Por último, también fue intervenido Signature, otra pieza clave para el mercado de criptomonedas.
Sin duda, la tensión aumentó en el mercado tecnológico. Esto originó una sensación de colapso, que apunta a una nueva reestructuración en el mercado estadounidense de inversiones.
La situación actual de la banca en Estados Unidos está influenciada por varios factores, como la postpandemia de COVID-19, la política fiscal y monetaria del gobierno, y la evolución de la economía en general.
Los siguientes aspectos influyen:
-Bajas tasas de interés: Desde la crisis financiera de 2008, la Reserva Federal ha creado leyes para evitar un problema igual y trabaja en mantener tasas de interés en niveles históricamente bajos (aunque la inflación no ayuda). El costo del dinero ha sido muy bajo, inicialmente, pero se ha incrementado con el tiempo para bancos y consumidores finales. Esto ha llevado a que las personas compren puntos para mantener intereses bajos.
-Consolidación bancaria: En los últimos años ha habido una consolidación significativa en la industria bancaria, lo que ha llevado a la creación de grandes conglomerados que pueden operar a nivel nacional. Esto ha permitido a los bancos crear estrategias para evitar que los usuarios retiren masivamente su dinero.
-Competencia de fintech: Los bancos tradicionales están siendo desafiados por las fintech, empresas que ofrecen servicios financieros innovadores y convenientes a través de la tecnología. Las fintech están ganando terreno en áreas como préstamos personales y pagos, lo que ha llevado a una mayor competencia.
Una tasa de interés baja puede ser beneficiosa para la banca, ya que permite ofrecer préstamos más atractivos y atraer a más clientes. Sin embargo, también puede reducir los márgenes de beneficio.
Por otro lado, una alta tasa de interés puede reducir la demanda de préstamos, lo que afectaría negativamente los ingresos y ganancias de los bancos. Esto significaría un retroceso en los mercados inmobiliarios. Además, haría que los préstamos fuesen menos atractivos para los consumidores, con la lógica afectación del negocio de compra de casas.
¿Cuáles serán los próximos escenarios? El pronóstico apunta a una reinvención económica, que estará acompañada de algunos cambios. Si se toman con precaución y con la evaluación correcta, serán superados en los próximos meses. Todos debemos prepararnos e instruirnos para manejar y/o proteger nuestro dinero en tiempos complejos, donde siempre prevalecerá el activo físico (las casas).