A sus 23 años de edad, la ingeniera en Tecnologías de la Información y Comunicaciones, en entrevista telefónica con Notimex, compartió su experiencia de desarrollar esta aplicación que puede descargarse para la plataforma Android, por el momento, únicamente.
“A mí me gusta mucho como se escucha el mixteco, me gusta hablarlo, me gusta hablarlo en mi casa, con mi abuela, con mi novio; más cuando estamos en sitios donde la mayoría de la gente no habla mixteco, y nosotros podemos conversar libremente. Porque me gusta es que quiero difundirlo”, relató.
Gisela Mendoza Flores es originaria del municipio de Chigmecatitlan, muy cerca de Izucar de Matamoros, en la región mixteca del estado de Puebla, sus estudios profesionales los realizó en el Instituto Tecnológico Superior de Tepeaca, donde surgió el proyecto en mayo de 2016, y lo concluyó en mayo de 2018.
Con la participación de 11 estudiantes de Ingeniería en Tecnologías de la Información y Comunicaciones, así como cinco personas de la comunidad de Chigmecatitlán, logró desarrollar Kadikinda.
Esta app consiste en un memorama del sistema decimal mixteco que es vigesimal, tiene ocho niveles y se basa en el método audio-lingual; como en el caso del método para aprender inglés, pero en este caso contiene audios en mixteco que fueron grabados por dos niños de la propia comunidad mixteca.
Cuando el jugador selecciona una carta del memorama se activa el audio y se escucha la pronunciación en mixteco para que el jugador conozca la pronunciación del número que aparece, mientras que en la parte de abajo se muestra cómo se escribe tal palabra.
La diferencia entre cada nivel del juego es que son números más grandes, en ese sentido precisó que el sistema decimal mixteco es vigesimal, en esta cultura mixteca tienen a los números del 1 al 20 para poder formar los demás números. Para escribir y leer un número mayor a 20 en mixteco, el número se divide en 20, si el residuo es 0 entonces se toma el cociente y se pronuncia como el número de veces que se encuentra veinte en dicha cantidad.
Como ejemplo explicó 120/20=6 por lo tanto en mixteco la cantidad es iñu diko, es decir, 6 veces 20.
Cualquier persona que esté interesada en conocer esta aplicación la puede descargar, es gratuito y solo necesita de la red de internet para el momento de la descarga, no así para jugarlo en el celular o en la pantalla
“Soy originaria de la comunidad mixteca, yo hablo mixteco, y decidí desarrollar esta aplicación viendo que los niños ya casi no hablan nuestra lengua materna, no tenían tanto interés y no sabían cómo hablarlo, así que me enfoqué en los niños de quinto año de primaria, pero todo el que quiera aprender puede descargarla”, indicó.
Agradeció el apoyo de los compañeros y profesores, con quienes fue encontrando el camino para diseñar la app, así que ahora los niños conocen un poco más de la lengua utilizando los medios tecnológicos, pues también se interesó en darle una utilidad más a las tabletas electrónicas que el gobierno federal, en sexenios pasados, distribuyó en las escuelas primarias.
“Lo que surgió como un proyecto de escuela saltó a un dominio en la red para poder darlo a conocer; fue como nos dimos cuenta que necesitábamos más trabajo en diseño para llevarlo al nivel de una aplicación".
Agregó que "realizamos pruebas con los niños de la primaria de Chigmecatitlán y fueron los niños quienes decidieron los colores, imágenes, diseño y personajes de Kadikinda”.
Desde el principio se hizo una encuesta de viabilidad con los niños, después una prueba de factibilidad. Con la asesoría de su papá Pedro Mendoza Zaragoza se revisó la parte de realizar un sistema decimal correcto, y con la asesoría de su compañero Israel Flores se obtuvo el diseño de las imágenes.
Con Kandikinda los participantes podrán aprender más de 80 palabras en mixteco. En el mismo juego hay una herramienta, titulada Ayuda, en la cual se explica a los participantes cómo se pueden calcular más números como 30, 50, 70, 110, 101, 1070, 2090, etc.
“Recuerdo que, cuando terminamos esta aplicación y la presentamos a la comunidad, todos estaban emocionados, principalmente los adultos porque no podían comprender como el mixteco se fusionaba con la tecnología, mientras que los niños estaban absortos porque escucharon que el audio corresponde a dos pequeños conocidos en la comunidad”, relató.
Diversas satisfacciones le han dejado Kadikinda a su desarrolladora, toda vez que con este trabajo se ha presentado en diversas ferias y concursos de ciencias, tecnología y cultura; así como concursos donde ha quedado en los primeros 10 lugares de las mejores aplicaciones, y merecedora de cursas posgrados en instituciones como la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).
La joven ingeniera se visualiza en un corto plazo seguir aprendiendo para desarrollar más apps y continuar trabajando en el rescate de más lenguas indígenas, incluirlas en los medios tecnológicos como los celulares y las tabletas electrónicas.
Mendoza Flores informó que actualmente se encuentra en el proceso de registro para los derechos de autor, así como el proceso de registro de marca.
Los riesgos que ya se corren -dijo- es la desaparición de las lenguas maternas, los jóvenes dejarán de hablar, los abuelos ya no se entienden con los niños porque los menores no saben hablar, ya sea porque les da pena, hay discriminación, y por la falta de difusión de que si una persona sabe hablar una lengua indígena puede tener más oportunidades de crecimiento.
Por lo anterior, ahora se encuentra trabajando en un proyecto para desarrollar una tienda en línea para la venta de artesanías de la comunidad indígena de Chigmecatitlan, donde los pobladores realizan diversos productos a base de palmas y de rafia, desde tamaño miniatura hasta artículos más grandes como bolsos, carteras.
Adelantó que en la página incluiría palabras en mixteco para que las personas que naveguen en la red conozcan más de la comunidad indígena mixteca de Chigmecatitlan, en la región mixteca del estado de Puebla.
“Yo aprendí a hablar mi lengua (mixteco), luego aprendí a hablar español y ahora estoy aprendiendo a hablar inglés. Ninguna lengua es prioritaria, todas se complementan, porque nunca he dejado de hablar mi lengua”, concluyó.