Violencia de género, reflejo de la ausencia del Estado

27 de Noviembre de 2020
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Ciudad de México. En la conferencia presidencial por la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y la comisionada nacional de Búsqueda de Personas, Karla Quintana Osuna, presentaron diagnósticos que reflejan los pendientes del Estado en torno a la violencia contra las mujeres.

Al hacer una reflexión sobre los discursos de la conferencia matutina de este miércoles, la subdirectora ejecutiva de la organización Equis Justicia para las Mujeres, Maïssa Hubert Chakour, consideró en entrevista que además de las afirmaciones del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre el neoliberalismo y la pérdida de valores como las causas del feminicidio, es importante resaltar lo que se dijo y se omitió en el balance de estos dos años de gobierno.

Por ejemplo, reconocer que hacen falta acciones de prevención, como lo dijo la secretaria de Gobernación: “Reconocemos que la prevención y atención de las violencias contras las mujeres y las niñas son un gran reto porque están en todas partes: en los hogares, en los centros de trabajo y en nuestra convivencia diaria. Por eso, trabajamos para cerrar las brechas de desigualdad e impedir que la cultura del abuso del poder siga vigente en nuestras dinámicas personales, familiares y colectivas”.

Hubert Chakour coincidió con la encargada de la política interna del país en que un pendiente del gobierno federal es la prevención de la violencia contra las mujeres, porque en ese campo se ha hecho poco, como se pudo notar este año durante la pandemia por COVID-19, cuando los servicios de atención a las mujeres víctimas de violencia se declararon esenciales, pero al operar las instituciones de procuración e impartición de justicia se quedaron con el dilema de qué es urgente.

Otro aspecto que Sánchez Cordero mencionó y que fue repetido por la comisionada nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, Fabiola Alanís Sámano, fue la importancia de los programas de bienestar, cuyo enfoque según el gobierno federal, es trabajar en las causas estructurales de la violencia y que de acuerdo con la ministra en retiro “tienen un impacto real y especial para generar bienestar en las mujeres y niñas”.

Maïssa Huber afirmó que si bien es importante atender la desigualdad económica y social, las expertas en estos temas han señalado que los programa sociales no están diseñados con perspectiva de género y como consecuencia no están para atender la desigualdad de género. Lo único que tienen programas como “Jóvenes Construyendo el Futuro”, “Sembrando Vida” y “Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores”, es que 50 por ciento de sus beneficiarios deben ser mujeres, pero “eso no lo hace resolver la desigualdad de género”.

Un ángulo más que la subdirectora de Equis tocó es el esfuerzo de la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas, Karla Quintana Osuna, en denunciar la criminalización que hace una parte de la ciudadanía de las mujeres que desaparecen y son localizadas con vida, ya que de ninguna manera las autoridades pierden el tiempo cuando buscan y localizan a una mujer con vida.

“Nos preocupa mucho la revictimización que se hace desde la sociedad, desde los medios, cuando una niña, una mujer adolescente, una mujer es encontrada con vida. Queremos encontrar a todas con vida, lo que nos tenemos que preocupar y preguntar es por qué desaparecen y luego aparecen”, dijo Quintana Osuna en su participación en Palacio Nacional.

La comisionada agregó que muchas mujeres y niñas desaparecidas son víctimas de violencia sexual, de violación sexual o huyen de la violencia familiar. Además agregó que otra hipótesis es la trata de personas. Por esta razón la Comisión Nacional de Búsqueda, de la Secretaría de Gobernación, impulsa dentro del Protocolo Homologado de Búsqueda un capítulo específico diferenciado para la búsqueda de las niñas, adolescentes y mujeres desaparecidas.

Este análisis, desde la mirada de Maïssa Hubert, de relacionar las desapariciones de mujeres con la trata de personas y el feminicidio y separar le problema de lo que sucede con los hombres, también debe reflejar que la violencia, además de tener un componente social tiene que ver con ausencia del Estado en el momento de buscar ayuda y servicios, pedir justicia y reparación.

Sin embargo, aclaró que aún hace falta un discurso político que legitime las demandas ciudadanas de las mujeres y que no criminalice las protestas. En contraste, en este gobierno se han dado episodios donde si bien no hayintención de deslegitimarlos movimientos feministas sí tienen ese efecto. A Equis, destacó, le hubiera gustado escuchar más discursos que reconozcan la legitimidad de las demandas de las mujeres.

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