El satélite tiene una vida útil de aproximadamente un año y se utilizará para estudiar los cambios climáticos globales y desarrollar rutas de envío en el Ártico, explicó Cheng Xiao, científico líder del proyecto.
"El Ice Pathfinder rectificará la falta de datos de observación polar de China y reducirá la dependencia del país de las importaciones de la tecnología", afirmó a la agencia de noticias Xinhua.
El lanzamiento del satélite se realizó el pasado 12 de septiembre y durante su estancia en el espacio envió más de mil imágenes de la región del polo sur, además observó dos grandes derrumbes de la plataforma de hielo y proporcionó un monitoreo continuo del desprendimiento de la plataforma de hielo, obteniendo imágenes y datos satelitales clave, señaló Chen
De acuerdo con reportes de prensa, los científicos chinos han realizado estudios polares basados en datos recopilados por embarcaciones y estaciones de investigación, pero ahora con uso de la tecnología satelital permitirá que obtengan nuevos datos.
"El Ice Pathfinder rectificará la falta de datos de observación polar de China y reducirá la dependencia del país de las importaciones de la tecnología", aseveró Cheng.
El satélite cuenta con una vida útil de un año, pesa 16 kilos y fue construido por científicos de la Universidad Normal de Beijing y desarrollado por Shenzhen Aerospace Dongfanghong Development Ltd.
Los reportes indicaron que “está equipado con cámaras de alta resolución que pueden lograr una cobertura total de la Antártida y el Ártico en cinco días. También tiene un sistema de identificación automática para que las embarcaciones naveguen por partes o la totalidad de las regiones polares”.
Apuntaron que en las próximas semanas el equipo dará a conocer los datos para apoyar la investigación polar china e internacional, además de que el satélite iniciará una nueva misión en el Ártico.