Con este acuerdo se beneficiará a 330 mil niños, de cero a tres años de edad, que asisten a poco más de nueve mil instancias infantiles y están bajo el sistema de Sedesol, pues 50 por ciento de estos menores no llegan a este nivel y se inscriben hasta el segundo año de preescolar.
Al encabezar el evento, el titular de la SEP, Otto Granados Roldán, señaló que con ello se permitirá ampliar la cobertura en este nivel escolar y se reducirá aún más la brecha para la alfabetización del país.
En el salón Iberoamericano de la dependencia, destacó que México está a cuatro décimas de alcanzar el nivel que exigen organismos internacionales, como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), para ser declarados sin analfabetismo.
Informó que la certificación del primer año de preescolar permitirá incrementar la cobertura en miles de niños, y reducir la magnitud del rezago educativo.
“En materia de analfabetismo estamos solamente a cuatro décimas de lograr la tasa de cuatro por ciento, a partir de la cual, de acuerdo con los estándares de la Unesco, se podría considerar a México un país libre de analfabetismo o plenamente alfabetizado”, expuso.
Informó que ésta es una meta en la que se trabaja de manera intensa, para alcanzar en los próximos 10 meses, y reducir en estas cuatro décimas este porcentaje, al final de la administración del presidente Enrique Peña Nieto.
Apuntó que no es una meta inalcanzable pues se trata solamente de unas 300 mil personas, “así que creo que la podremos lograr”.
Granados Roldán indicó que con el Programa de Educación Inicial, en el cual se enmarca este convenio, es un buen comienzo, y la firma de estos documentos dan plena garantía de que los sucesivos gobiernos del país mantendrán un compromiso firme y duradero con el cuidado y la educación mexicana en sus etapas más tempranas.
Subrayó que este convenio no se trata sólo de una iniciativa conjunta entre un grupo de individuos o instituciones, sino de una colaboración interinstitucional en la que el Estado mexicano compromete varios de sus componentes al servicio de la niñez.
Ante los titulares de Sedesol, Eviel Pérez Magaña, y del DIF, Laura Barrera Fortoul, Granados Roldán agregó que “esta reforma educativa no se hizo para un sexenio, sino al servicio de una política de Estado favorable a una educación de calidad a largo plazo para los niños de México”.