Managua, 20 Jul 14 (Notimex).- La Policía de Nicaragua informó hoy la captura de cuatro personas sospechosas de dos ataques con armas de fuego en contra de manifestantes sandinistas, que la víspera dejaron cinco muertos y 19 heridos.
La jefe de la policía, Aminta Granera, dijo este domingo que están identificados los miembros de un grupo delincuencial responsable de la emboscada, ocurrida la noche del sábado en San Ramón, del norteño departamento de Matagalpa.
Grupos especializado de la institución realizan investigaciones para identificar y capturar a los presuntos responsables del ataque con fusiles AK-47 y escopetas.
Un primer ataque sobrevino en el sector de Puertas Viejas, en el kilómetro 60 de la Carretera Panamericana Norte a la altura de una población conocida como Calabazas, con saldo de cuatro muertos, y el segundo en San Ramón, Matagalpa, que provocó la muerte de un hombre.
Granera dijo que no podía revelar detalles de las investigaciones para no entorpecer el proceso, dirigido por la máxima jefatura policial.
Calificó de “asesinos” y “criminales” a los autores de los tiroteos, quienes “se ocultaron en la oscuridad de la noche y dispararon a unos 15 metros de distancia” de los autobuses.
Los manifestantes sandinistas regresaban a sus comunidades de origen tras participar en la conmemoración del 35 aniversario de la revolución en Managua. Se prevé un liturgia con los familiares de las víctimas el lunes.
Los muertos fueron identificados como Vilma Gómez, de 48 años; Esther Gómez, de 28; Yader Sáenz, de 22; Germán Martínez, de 24; y Yelsin Talavera, de 20, este último originario de San Ramón.
Los cuatro capturados se encuentran detenidos en la Dirección de Auxilio Judicial de Managua para investigar su eventual participación en los hechos.
La institución declaró “profundo dolor y consternación” por “el cobarde y brutal asesinato con armas de fuego”, mientras que el gobierno del presidente Daniel Ortega condenó y repudió el ataque “cobarde y brutal” contra civiles inocentes.
La portavoz oficial, Rosario Murillo, se refirió como “una bestialidad” al ataque, una “corbardía” de “unos cuantos” que viven “llenos de odio”, y aseguró que se trata de un hecho aislado.
“El pasado no volverá”, puntualizó Murillo, en alusión a la guerra de la década de 1980 entre sandinistas y antisandinistas “contras”, con apoyo de Estados Unidos.
“Estamos de duelo, consternados y conmovidos”, agregó. Ortega pidió a la policía y el ejército “garantizar la seguridad” ciudadana y avanzar en las investigaciones del múltiple crimen.