Mezcla mexicana promediaría 90 dólares en 2014

02 de Marzo de 2014
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México, 2 Mar. (Notimex).- El precio de la mezcla mexicana de petróleo de exportación se mantendría estable y registraría un promedio por arriba de los 90 dólares durante 2014, estimó el director del Departamento de Negocios Internacionales del ITESM, Campus Santa Fe, Juan Carlos Rivera.

Expuso que contrario a las estimaciones que refieren una posible reducción del precio del crudo debido a una sobreoferta, la demanda de hidrocarburos se verá favorecida por el cambio climático.

Así, los contratos a futuro para la entrega a partir del segundo semestre de 2014 serán impulsados al alza, abundó el catedrático del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).

De hecho, refirió las estimaciones de la Agencia Internacional de Energía (AIE), que anticipan un incremento en la demanda de entre 900 mil a 1.2 millones de barriles diarios para alcanzar los casi 91 millones de barriles consumidos a diario.

En su opinión, esto significará para México un aumento en la exportación y desde luego en la producción, independientemente de que la recuperación económica de Estados Unidos no vaya a ser tan rápida como se esperaría.

Por lo anterior, descartó que la mezcla baje más allá de los 83 a 85 dólares el barril, lo cual sería un fenómeno estacional.

Al respecto, el vicepresidente de Desarrollo Estratégico de Negocios América Latina de la consultora internacional Argus, Jaime Brito, destacó que este año continuará el crecimiento de la demanda mundial de petrolíferos.

Aún así, advirtió que este incremento sería moderado comparado con el que se presentaba cuando “todo era alegría de la demanda china”, lo que permitió un aumento en la demanda de hasta 2.5 millones de barriles por día en promedio anual.

En 2013 este crecimiento fue de 1.2 millones de barriles “y todavía está por confirmarse”, lo que representaría aproximadamente la mitad de lo que crecía la demanda cuando había bonanza, aunque este 2014 se prevé que sea mayor.

“Considerando que la demanda es un factor fundamental que mueve los precios, y que para este año la demanda podría ser más alta que la de 2013, de manera automática uno podría pensar que el precio del crudo sería más caro que el año pasado”.

Para Brito, este crecimiento de demanda iría enfocado sobre todo en economías emergentes, es decir, países como India, China, Tailandia, así como de Medio Oriente y un poco de América Latina.

Consideró que el mundo está partido en dos, de manera que el crecimiento mundial de petrolíferos se incrementa por un lado en los países emergentes, mientras que Europa y Estados Unidos se encuentran en franca recuperación, lo que amortigua que suban los crudos de referencia.

Se espera que este año continúe el alza de recursos shale, por lo que este desbalance de mercado podría afectar negativamente a los precios o limitaría que el crudo de referencia West Texas Intermediate (WTI) suba de precio como debe subir, efecto determinante para definir los precios del crudo en América Latina, apuntó.

A decir de la directora del Centro de Análisis Económico del Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México, Leticia Armenta Fraire, el precio no sólo de la mezcla mexicana, sino de los marcadores internacionales como el WTS y el Brent han comenzado a bajar desde agosto y octubre de 2013.

Lo anterior por la expectativa que se tiene sobre la autosuficiencia energética de Estados Unidos, que para México representaría una disminución de sus exportaciones a ese país.

En segundo lugar, está China, uno de los grandes consumidores que favoreció que el precio se mantuviera en 100 dólares por tonel desde 2011 al pasado mes de agosto, aseveró la doctora del ITESM.

Subrayó que el país asiático ha bajado su dinamismo y aunque no ha dejado de crecer, se perfila como uno de los posibles productores de recursos no convencionales como el shale gas y el shale oil.

Esto, previó, eventualmente tendría una repercusión en la demanda de energéticos, ya que China en los últimos años ha sido motor de la demanda de crudo por su crecimiento y dependencia de la energía.

En el caso de Estados Unidos, la explotación de recursos shale es algo más concreto, por lo que en el mediano plazo alcanzaría la autosuficiencia energética, lo que implica una reducción de las importaciones de petróleo mexicano, sostuvo Armenta Fraire.

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