Unidad Canina de PC Guerrero, preparada para participar en siniestros

16 de Septiembre de 2018
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Acapulco, 16 Sep (Notimex).- Adahara, Kira y Loky, son tres labradores que forman parte de la Unidad Canina de la Secretaría de Protección Civil del estado y que luego del sismo del 19 de septiembre de 2017 localizaron en la Ciudad de México seis cuerpos sin vida.

Además, encontraron a ocho militares que perdieron la vida durante una fuerte tormenta en el municipio de San Miguel Totolapan, Guerrero, en junio de 2017.

La Unidad Canina de Búsqueda y Rescate está adherida a la Asociación Internacional de Formación y Capacitación de Adiestradores de Perros, por lo que pueden asistir a cualquier emergencia que se presente a nivel nacional e internacional.

Emmanuel Dueñas Armenta, médico veterinario y director de la Unidad, dijo que tres perros de la raza cobrador de labrador participan en campo abierto y estructura colapsada.

Asimismo, Puppy, otro cachorro de la misma raza se encuentra en entrenamiento.

También dos perros de raza Golden Retriever, Hanna de tres años y Damián de tres años y medio que forman parte del área de caninoterapia y que ayudan a niños con discapacidad.

Han participado en su rehabilitación y a restablecer la autoestima a los menores del DIF y del Centro de Rehabilitación Integral de Guerrero, así como el Teletón.

Mencionó que para el buen rendimiento de sus actividades, los perros deben tener un peso ideal, con rutina de trabajo, otorgarles alimento de calidad, estar vitaminados y desparasitados.
“Son perros atléticos y deben de tener masa muscular y un labrador de talla mediana que es un perro de casa, oscila entre los 30 kilogramos de peso y un can en estas condiciones es de trabajo como Loky que está pesando entre 27 a 27 y medio dependiendo de las rutinas de trabajo", indicó.

Añadió que comen alimento súper premium entre 650 a 700 gramos al día son las cantidades de alimento y están en buenas condiciones de salud.

El médico veterinario recordó que luego del sismo del 19 de septiembre del 2017, la Unidad Canina de la Secretaría de Protección Civil Guerrero llegó el día 20 a la delegación Tlalpan, donde de manera coordinada con la Secretaría de Marina y Ejército ayudaron en la búsqueda de personas que se encontraban bajo los escombros.

El manejador canino Alejandro Fonseca estuvo a cargo de Kira; Marco Ortega con Loky y Abel González con Adahara.

Indicó que en la delegación Tlalpan, los caninos localizaron los primeros dos cuerpos sin vida y posteriormente en el edificio colapsado en Petén 915, en la delegación Benito Juárez se hizo dos marcajes más, donde se encontraron dos cuerpos sin vida.

En la colonia Roma, los labradores localizaron dos cuerpos más y una persona a salvo.

Comentó que en junio del 2017, los tres caninos participaron en la búsqueda de ocho militares que fueron sepultados por un laúd de tierra durante una fuerte lluvia que se registró en el municipio de San Miguel Totolapan, Guerrero.

La perra negra Kira, encontró el rastro por el cauce del río y dio con el paradero de los ocho cuerpos de los militares que lamentablemente fueron rescatados sin vida.

Para Emmanuel Dueñas cada perro tiene su particularidad a la hora de trabajar. Adahara, dijo, es una perra que siempre tiene ganas de trabajar con un nivel de energía muy alto y es la más efectiva en los simulacros de entrenamiento, gracias a ella se encontraron los cuerpos de militares en San Miguel Totolapan.

A sus cuatro años aún está en óptimas condiciones de trabajo y a los siete años de edad puede jubilarse.

El médico veterinario, precisó que un balón tela o mordedera es el pago que le dan por encontrar a una víctima, que está hecho de yute y tela y no le afecta su dentadura a la hora de responder.

En un terreno aledaño a la Unidad de Protección Civil de la zona Diamante de Acapulco, Emmanuel Dueñas Armenta, médico veterinario y Director de la Unidad Canina de Búsqueda y Rescate de la dependencia estatal junto con los manejadores y los tres perros labradores Kira, Adahara y Loky realizaron un simulacro de entrenamiento.

En el lugar se diseñaron escondites con tablas de palet, ramas, se utilizó un pozo y se simuló que uno de los manejadores cayó y no puede salir por lo que se utilizó la unidad canina para la búsqueda.

Adhara, labrador negra, se le da la orden de buscar a la víctima que cayó al pozo, con una agilidad y en poco tiempo lo encuentra. Posteriormente, Loky busca a una víctima que cayó a un pozo y con un poco de distracción por los olores en campo abierto, logra encontrar con vida a la persona.

Kira es otra perra que participa en el simulacro y localiza a la víctima que en una hipótesis de sismo le cayó escombros encima. Mediante un ladrido, los tres canes logran con éxito encontrar a la víctima y avisar a sus manejadores.
“Hay que ser consciente de ellos, pero dichos perros siempre dan la vida trabajando y por uno y hay que saber retribuirles eso con buen trato, buena alimentación y cariño”, comentó Dueñas Armenta.

Por su parte, Abel González Vázquez, paramédico rescatista del área de protección civil, quien tiene a su cargo a Kira, expresó que durante su participación trás el sismo del 19 de septiembre se enfrentó a algo doloroso, pero tanto él y su perro están preparados para trabajar en caso de siniestro.

Alejandro Fonseca, manejador canino y jefe del departamento de la unidad canina, tiene a su cargo a Adahara y junto con Kira y Loky realizaron una búsqueda en el área del edificio de Petén e hicieron marcaje efectivo de tres cuerpos sin vida.

Marco Antonio Ortega González, subdirector de la unidad canina, tiene a su cargo a Loky y recordó que cuando los enviaron a la Ciudad de México se unieron a un grupo de otros 25 canes de búsqueda y rescate con el cual se coordinaron los operativos con Marina.
Comentó que la aceptación de la gente para los binomios en general es muy buena y para ellos como manejadores fue una buena experiencia.

Durante su participación de rescate en la Ciudad de México, los perros fueron revisados durante cada ingreso por dos o tres médicos veterinarios, con el objetivo de garantizar que no hubieran tenido lesiones durante su labor de búsqueda.