Y es que en promedio una lista de útiles escolares y todo lo necesario para regresar a clases representan un gasto promedio de 30 salarios mínimos, algo así como $2,650.00 o hasta $5,000.00 por alumno.
Sin embargo, es muy importante tomar en cuenta ciertas consideraciones y no dejar que el bache financiero te persiga por todo el ciclo escolar. Recuerda que los compromisos que adquieras en este momento, estarán vigentes por lo menos durante un año, o más.Si te encuentras por un momento apretado económicamente, antes de tomar decisiones de endeudamiento te recomendamos tomar en cuenta los siguientes tips:
• Ante todo hay que guardar la calma y comenzar una planeación, la cual no consiste en otra cosa más que en realizar una lista de todos los requerimientos que requieren tus hijos para poder regresar a clases.• Una vez que tienes la lista, tienes que recordar que no todo tiene porque ser nuevo. Es importante hacer un recuento de que se tiene y pueda servir aún, para este nuevo ciclo escolar.
• Separa “querer” de “necesitar”, es muy importante que tus hijos puedan adquirir conciencia de que solo se puede comprar lo realmente necesario y que cubra las necesidades que requieren para cumplir con sus actividades de estudiantes.
• Cuando ya tengas detectadas las compras necesarias, compara precios, marcas y productos en diferentes tiendas.
• Compra de forma inteligente, en esta época hay muchas ofertas que puedes aprovechar, además de cupones y descuentos.
• Considera el intercambio en artículos usados o de segunda mano, ya sea de tus propios hijos entre los pequeños y los grandes, o bien con vecinos o amigos en donde ambos puedan intercambiar, desde libros y hasta uniformes en buen estado.
• Compra al mayoreo, organízate con vecinos y amigos para comprar los útiles escolares juntos, y poder llevar a cabo compras por mayoreo que resulten en ahorros económicos importantes.
• Espera las rebajas, la mayoría de los establecimientos rematan útiles escolares un mes después del inicio de clases y ahí podrás aprovechar para realizar las compras que no sean tan urgentes y que puedan esperar.
Lo importante es no entrar en pánico, y hacer un análisis minucioso de lo que se puede gastar y de lo que no, pero ante todo del monto económico al que se puede acceder sin afectar las finanzas familiares.
Recuerda que en el momento podemos resolver las situaciones urgentes sin analizar las repercusiones futuras, que después traerán otros problemas que tendrás que enfrentar. Así que, guarda la calma y analiza todas las posibilidades de ahorrar antes de tomar tus decisiones finales.