Ley obligará a fraccionadores garantizar áreas a ciclistas y peatones

12 de Marzo de 2018
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Querétaro, 12 Marzo 2018.- La Comisión de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, del Congreso Local, autorizó modificaciones al Código Urbano del estado, a fin de garantizar el libre desplazamiento de peatones y ciclistas en las obras de urbanización de los diferentes desarrollos inmobiliarios.

Con esta modificación se obliga a que los nuevos desarrollos habitacionales, tomen en cuenta desde su diseño y planeación, las necesidades de todos los usuarios de la vía pública, para brindar una movilidad segura y funcional, en especial a los peatones adultos mayores, personas con discapacidad y ciclistas.

De acuerdo con el presidente de la Comisión, Gerardo Ángeles Herrera, se pretende que en Querétaro “se cuente con espacios públicos de mayor calidad, con un entorno seguro, pero también se busca reducir la cifra de víctimas por accidentes de tránsito”.

Por su parte, la diputada Carmelita Zúñiga, informó que, de acuerdo con datos de la ONU, cada año se pierden aproximadamente 1.25 millones de vidas a consecuencia de accidentes de tránsito en el mundo.

La diputada del Partido Acción Nacional indicó que esta reforma reducirá en gran medida los costos que deben erogar los beneficiarios de los predios; asimismo, se pretende actualizar el valor de los predios susceptibles a regularización, para pasar de 12 mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMAS) a 7 mil 500.

El diputado Gerardo Ángeles, dio a conocer que hasta el momento esta ley indicaba que cualquier obra por pequeña que fuera y que ocupara hasta el punto .002% del Presupuesto de Egresos, requería una licitación y no podía ser por asignación directa. Hoy se modifica al .004%; esto quiere decir que las obras que son muy pequeñas, ya se deberán entregar por asignación directa.

De igual forma señaló que esta reforma beneficia tanto a constructores como la realización de este tipo de obras ya que podrán fluir con mayor rapidez; toda vez que muchas veces se declaraban desiertas, pues a los constructores no les conviene hacer trámites de concursos y fianzas en obras tan pequeñas, en donde la ganancia es muy poca.