Esto luego de las denuncias públicas que han realizado, sobre agresiones que han sufrido mientras realizan su labor humanitaria con los migrantes en tránsito que viajan en el tren, además de malos tratos a los propios migrantes.
De ahí que hizo un llamado para que se les brinde la seguridad necesaria, además de solicitarles a los gobiernos locales que vigilen la zona y no cuerpos de seguridad privados, ya que se deshacen de la responsabilidad que tienen en materia de seguridad pública.
Indicó que los casos de ataque o malos tratos contra los migrantes en tránsito, son recurrentes e incluso se les niega la atención médica por ser centroamericanos o con la condición de llamar al Instituto Nacional de Migración, lo que argumentan que se trata de una clara violación a sus Derechos Humanos.
Los malos tratos se dan no solo en el sector de salud, sino de parte de casi cualquier autoridad estatal y municipal; como los DIF municipales y estatal, por las policías y autoridades administrativas, cayendo incluso en detenciones arbitrarías.
“Los abusos en temas de Derechos Humanos, simplemente por caminar, por estar cerca de las vías, por estar en un crucero, las personas son cuestionadas e incluso detenidas en ese sentido, encarceladas en ocasiones, cuando simplemente no pueden actuar de esa manera, las leyes mexicanas lo dicen muy claro y no pueden hacer eso”.
La problemática comienza -dijo- cuando los elementos no conocen los protocolos en Derechos Humanos y por lo tanto no los aplican, insistiendo que en este tema de capacitación ayudaría mucho crear un Instituto Estatal del Migrante.
Finalmente dijo continúa en reuniones y diálogos con las autoridades estatales para poder crear este instituto, pero no se le da la prioridad que requiere a pesar de ser una promesa de campaña del gobernador del estado, Francisco Domínguez Servién.