Juan Carlos Arreguín, resaltó que si los empresarios no cumplen con las observaciones hechas durante el día de la cancelación y se pagan las multas correspondientes, no podrá llevarse a cabo el concierto.
Arturo Molina reconoció que se tendría que revisar los mecanismos debían prever las fallas que se tuvieron en la planta de luz, que no permitieron hacer funcionar el escenario.