“Tengo el objetivo de clasificar a unos Juegos Olímpicos”, dijo la especialista en las pruebas de 4x100 y 4x400 metros planos.
No obstante, también admitió que pensar en Tokio 2020 es aventurado porque termina su etapa juvenil y tener la meta en la categoría mayor representa una ardua labor, ya que las exigencias son altas, así como los planes de entrenamiento.
“Definitivamente se termina mi etapa juvenil, solo nos quedan los eventos libres; no sé cuántos años me queden en esta carrera, pero por lo pronto quiero seguir viviendo este ciclo y uno más”, señaló a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade).
Mientras llega el momento de retroalimentar ese deseo, la mexicana espera tener una buena actuación en la Universiada Mundial en Italia, en donde tiene confianza de subir al podio como lo hizo en Taipei en 2017 con la presea de plata.
Refirió que para la justa universitaria mundial, trabajará de manera coordinada con sus compañeras en el relevo, para tratar de llegar a las finales y de esta manera mejorar la plata de 2017.
“Vamos a trabajar en los relevos, estamos ambas modalidades 4x100 y 4x400 metros, es para poder ajustar los cambios, sincronizarnos bien con las compañeras y después partir a Italia”, señaló.
En la Universiada Mundial de Taipei en 2017, Iza Daniela Flores se apoderó de la plata en el relevo 4x400 junto a Natali Brito, Dania Aguillón y Paola Morán, al detener el crono en 44.87 segundos, que a su vez fue marca mexicana.
La Universiada Mundial se realizará del 3 al 14 de julio en Nápoles, Italia.