Los fiscales federales informaron que la mañana de este martes le fue retirada la vigilancia por suicidio en una cárcel de Brooklyn al cantante R. Kelly, después de ser sentenciado la semana pasada a 30 años de prisión tras ser condenado por tráfico sexual.
El artista con nombre de pila Robert Sylvester Kelly demandó a los funcionarios del Centro de Detención Metropolitano el pasado viernes señalando que los agentes carcelarios ordenaron esta medida “únicamente con fines punitivos y porque era un recluso de alto perfil”.
Ante esta solicitud presentada en el tribunal federal de Brooklyn, los fiscales indicaron que decidieron retirarle la vigilancia por suicidio al artista después de evaluarlo clínicamente.
Fue en septiembre pasado cuando Kelly fue condenado por asociación ilícita y ocho cargos de violación de la Ley Mann, que prohíbe el transporte de personas a través de las fronteras estatales para la prostitución.
La autoridad aseguró que el artista conocido por el éxito “I Believe I Can Fly” explotó su estrellato y riqueza durante dos décadas para atraer a mujeres y niñas menores de edad para mantener relaciones sexuales, con la ayuda de personas de su entorno.
Conjuntamente, el famoso enfrenta otro juicio en un tribunal federal en Chicago por cargos relacionados con la pornografía infantil.