Ciudad de México.- Las exdiputadas federales que integran el colectivo “Rebeldes con causa” se manifestaron a favor de mantener en Anexo 13 del Presupuesto de Egresos de la Federación, por ser el apartado donde se concentran los recursos para la igualdad entre mujeres y hombres.
En el debate semanal que organiza este colectivo, Lorena Villavicencio Ayala, militante de Morena; Verónica Juárez Piña, del PRD; y Martha Tagle, de Movimiento Ciudadano, coincidieron en que las diputadas federales deben analizar el proyecto de presupuesto y revisar qué programas mantener en este apartado y cuáles deben recibir más recursos.
Villavicencio Ayala destacó que casi 84 por ciento de los recursos que se planean destinar para el Anexo 13 en 2022 será para los programas sociales impulsados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, destacó que algunas personas, incluyendo feministas, han señalado la pertinencia de eliminar este Anexo y establecer que cada uno de los ramos que componen el presupuesto tengan perspectiva de género.
Por ejemplo, durante la “3a Conferencia de legisladoras y organizaciones de la sociedad civil”, que se realizó este 11 de octubre, la consultora feminista, Patricia Olamendi Torres, puso sobe la mesa analizar la posibilidad de reestructurar o eliminar el Anexo 13.
Al respecto, la exdiputada por Movimiento Ciudadano, Martha Tagle, destacó que promover la desaparición de este Anexo es una posición política, no una opinión de expertas en el tema de presupuesto.
Señaló que eliminar este apartado, que surgió por impulso de legisladoras y feministas en la 60 Legislatura, es como decir que si no funciona el Instituto Nacional de las Mujeres hay que desaparecerlo.
Tagle Martínez señaló que este apartado permite identificar con claridad cuáles son los programas que hacen aplicable el marco legal para garantizar los derechos de las mujeres, entre ellos la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
Agregó que hay dos características fundamentales de este Anexo 13: la primera es que permite o son programas que permiten disminuir brechas de desigualdad entre mujeres y hombres y la segunda es que ha permitido dar seguimiento a las políticas de igualdad.
La exdiputada mencionó que con este Anexo se identificó que desde 2008, a la fecha, ningún gobierno incluye a las mujeres. “No es cierto que somos prioritarias; somos un discurso, nos tratan como La Bartola, pero si no hubiera Anexo ni siquiera podríamos darnos cuenta de que no hay recursos que se están dirigiendo para atender las desigualdades entre mujeres y hombres”, dijo.
Con esta posición coincidió la perredista Verónica Juárez Piña, quien señaló que el Anexo es un instrumento establecido en la ley “donde se ve dónde están los dineros”. Sin embargo, criticó que en este documento se han dejado de lado los programas que sirven para atacar las brechas de desigualdad y prevenir la violencia contra las mujeres.
Desde 2008, cuando por primera vez se etiquetaron recursos para la igualdad, estos montos han incrementado año con año. En ese entonces se destinaron 7 mil 024.80 millones de pesos y en 2020 fueron 103 mil 527.82 millones de pesos.
A su vez, la exdiputada Lorena Villavicencio Ayala, destacó que a pesar de que esta bolsa se incrementó de manera muy importante y se enfocó en los programas sociales, éstos no están diseñados con perspectiva de género y los incrementos no se reflejan en los programas que van dirigidos a eliminar las desigualdades.
Mencionó que actualmente se dan recursos a la Guardia Nacional, pero no recursos para “programas fuertes” destinados a la prevención de la violencia, cuando estamos viviendo una de las épocas más violentas contra las mujeres, derivada de la pandemia por COVID-19.
Las políticas recordaron que la Cámara de Diputados tiene la facultad de discutir, modificar y aprobar el presupuesto para 2022, por lo que confiaron en que esta Legislatura, la primera con 50 por ciento de mujeres, defienda los recursos para la igualdad y rescate los programas de escuelas de tiempo completo, comedores comunitarios, microcréditos para las mujeres, entre otros.