Tomates, una posible fuente asequible de medicamentos para el Parkinson

11 de Diciembre de 2020
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tomates-pixabay
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Científicos modificaron genéticamente tomates para obtener levodopa y contar con una fuente asequible para la fabricación de medicamentos para el Parkinson

La enfermedad de Parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común, justo después de la enfermedad de Alzheimer. Según datos de 2015 publicados en la revista científica The Lancet, globalmente hay cerca de 7 mil personas con la enfermedad. Desafortunadamente, en países en desarrollo, la enfermedad de Parkinson es un problema creciente, dada la imposibilidad de muchas personas de cubrir el costo de 2 dólares diarios de levodopa.

Este medicamento es el más eficaz para el tratamiento de la enfermedad y es considerado un medicamento esencial por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Para abordar este problema, científicos han creado un tomate enriquecido con el fármaco levodopa que podría convertirse en una fuente nueva y asequible de este medicamento.

Aunque la forma más común de producir levodopa es la síntesis química, existen algunas otras fuentes naturales. Hasta ahora, el frijol terciopelo (Mucuna pruriens) ha sido la fuente de levodopa más estudiada, aunque ha resultado problemática debido a su cubierta de pelos urticantes, responsables de alergias en quienes lo cultivan.

Además, estos frijoles causan niveles elevados de triptaminas, responsables de causar alucinaciones en pacientes con Parkinson. Para esta investigación, publicada a finales de noviembre en la revista científica Metabolic Engineering, se optó el escoger al tomate como fuente de levodopa por ser ampliamente cultivado alrededor del mundo.

Mediante una modificación genética, los científicos consiguieron estimular la fabricación de levodopa específicamente en la parte de la fruta de la planta de tomate. El equipo de investigación reportó haber conseguido niveles de levodopa comparables con los de otras plantas que acumulan la sustancia. Específicamente se obtuvieron 150 miligramos de levodopa por cada kilogramo de tomate, sin algunos de los inconvenientes conocidos de otras plantas, como aquellos del frijol terciopelo.

El siguiente objetivo de los investigadores es crear una tubería de producción donde se extraiga la levodopa de los tomates y se purifique en un producto farmacéutico. La idea de los autores del estudio es aprovechar la facilidad de cultivar, con relativamente poca infraestructura, estos tomates genéticamente modificados.

A partir de esto, una industria local podría preparar el medicamento con la levodopa de los tomates, mediante su purificación con tecnología relativamente sencilla que podría distribuirse localmente.

Actualmente no existe una cura para enfermedad de Parkinson, aunque existen tres tipos de tratamientos farmacológicos. Según el Instituto nacional de trastornos neurológicos y accidentes cerebrovasculares de Estados Unidos, la levodopa pertenece al primer tipo, al de medicamentos destinados a incrementar la dopamina en el cerebro. La segunda categoría engloba medicamentos destinados a otros neurotransmisores con el fin de aliviar algunos síntomas de la enfermedad. Por ejemplo, medicamentos anticolinérgicos se utilizan con el fin de reducir los temblores causados por la enfermedad. Finalmente, la tercera categoría corresponde a los medicamentos que controlan otros síntomas no motores de la enfermedad. De esta categoría podrían mencionarse los antidepresivos, a menudo recetados para tratar la depresión asociada a este padecimiento.

Tratándose de una enfermedad incurable, sigue siendo alentador el desarrollo de nuevo métodos para la fabricación de fármacos utilizados para tratar el padecimiento.

Este método que hace del tomate una fuente asequible para la obtención de levodopa será especialmente benéfico para países en desarrollo, donde la gente con enfermedad de Parkinson podría tener dificultades para costear su tratamiento.