La legisladora argumentó que es contrario a la constitución mexicana la limitación que se tiene al acceso de las funciones directivas en la universidad por razones de edad.
Al respecto, la propuesta es reformar las disposiciones para eliminar el tope de edad para ocupar el cargo de Rectoría o de una dirección de unidad académica de la UAQ, el cual era de 60 años de edad.
Tras comentar que la disposición es discriminatoria, la iniciativa sugiere que el interesado en ocupar dicho puesto deberá contar con más de 30 años de edad, sin límite de años.
“Es discriminatorio, atendiendo a lo dispuesto por la Comisión Interamericana para la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores. Debemos de trabajar para mejorar las condiciones de igualdad de todos los derechos humanos y las libertades de la persona mayor”, argumentó.
La legisladora explicó que dicho proyecto reforma los artículos 21, fracción II y 36, fracción II de la Ley Orgánica de esta casa de estudios, con el fin de actualizarla de acuerdo a las necesidades actuales.
Al recordar que la UAQ es un organismo público descentralizado del estado, dotado de autonomía, personalidad jurídica y patrimonio propio, indicó que no se había hecho modificaciones desde 1986.
“Requiere de manera inmediata y necesita ser actualizada, por lo que algunos de sus preceptos han dejado de tener razón de ser, ya que han cumplido con su objetivo y han quedado desfasados por el avance social”, manifestó.
Asimismo, Larrondo Montes comentó que es necesario evaluar el crecimiento demográfico de este sector de la población, para generar mayor inclusión en la sociedad.
Añadió que este tipo de desventajas en la universidad provocan prejuicios, estereotipos y discriminación para la población envejecida.