El documento establece modificaciones a los artículos 78 y 228 del código penal para el estado de Querétaro, que señala una pena de uno a ocho años de prisión y de 10 a 100 UMAS de multa a quien provoque la muerte de una persona.
Asimismo, a quien maneje en estado de ebriedad, una sanción de seis meses a tres años de prisión, de 100 a 400 horas de trabajo comunitario y la inhabilitación para conducir al retirar la licencia durante seis meses.
El objetivo es, dijo la legisladora, generar más conciencia para quienes infringen la ley y ocasionan daños materiales o pérdidas humanas; esto, a raíz del accidente sobre Prolongación Constituyentes, el pasado 12 de enero, donde un menor de 4 años perdió la vida.
“La intención es garantizar que ninguna persona tenga oportunidad de estar en un auto conduciendo, y privando del derecho de vida a sus hijos. Es un tema relevante, porque tiene que ver con la responsabilidad y la conciencia, y una mayor difusión de una conciencia para manejar un auto”, apuntó.
Preciso que esta modificación va dirigida principalmente a la responsabilidad que deben tener los padres de familia para manejar con precaución, para no poner en riesgo la vida de los hijos.
La legisladora destacó que actualmente, cada 26 horas muere una persona por accidente de tránsito, y anualmente se registran 326 defunciones, según datos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Puntualizó que en 2019, el estado de Querétaro ocupaba el cuarto lugar nacional con una tasa de 15.7 casos de accidentes viales fatales; y se posicióno como la segunda causa de muertes y la primera de accidentes vehiculares.
Indicó que las avenidas más peligrosas son av. 5 de Febrero, Boulevard Bernardo Quintana, la Carretera Estatal 120 San Juan del Río- Xilitla y el anillo vial Fray Junípero Serra.