El pasado 6 de noviembre, mediante el portal Charisma News, se hicieron públicas las denuncias de cinco mujeres, quienes señalaron a Crist de conductas inapropiadas, las cuales van desde mensajes sexuales no deseados hasta ofrecer boletos de sus “shows” a cambio de favores sexuales.
“Según varias fuentes, Crist ha explotado su reputación cristiana y su plataforma para hostigar, manipular y explotar a las mujeres jóvenes en los últimos siete años”.
El comediante le respondió al medio a través de una carta en la que señala que, aunque no es culpable de todo lo que se le imputa, admite tener un comportamiento “destructivo y pecaminoso. He pecado contra Dios, contra las mujeres y las personas que más amo”.
Reconoció también que ha “violado mis propias creencias, convicciones y valores cristianos, y lastimé a muchas personas en el proceso. Lamento el dolor que he causado a estas mujeres y continuaré buscando su perdón”.
En el documento señaló que en los últimos años ha buscado y recibido tratamiento por sus pecados sexuales y luchas por la adicción, motivo por el cual está comprometido con la curación y la libertad de su pecado.
Por lo anterior, decidió cancelar las fechas restantes de su gira 2019, esto, con el objetivo de estar saludable “espiritual, mental y físicamente”.
Asimismo, el programa especial de stand up I ain't prayin 'for that”, que Netflix planeaba liberar el 28 de noviembre, desapareció de su lista de estrenos y de acuerdo con un portavoz de la plataforma, se encuentra congelado y quedará en espera, informó The Hollywood Reporter.
El portal cristiano describe a Crist, quien cuenta con millones de seguidores en las redes, como el “hijo de un pastor de Vineyard mejor conocido por su comedia de stand up y sus populares videos que satirizan la cultura cristiana”.