Un protocolo es un instrumento de coordinación, para que todas las autoridades y sus servidores públicos, sin importar su fuero (estatal o municipal) o competencia, sepan qué hacer cuando se presenta una mujer que sufre violencia, con quién canalizarla, cómo atenderla en primer plano y prestarle los primeros apoyos o auxilio.
“Con esta Iniciativa de Ley lo que proponemos es que el protocolo sea un instrumento de coordinación entre todas las autoridades, a fin de que estas cuenten con modelos unificados de atención a mujeres que sufren violencia”, subrayó Arredondo Ramos.
El protocolo será elaborado por el Instituto Queretano de las Mujeres (IQM), e instaurado por el Sistema Estatal para prevenir y erradicar la violencia de género, que sea obligatorio para todo servidor público, de lo contrario serán acreedores a una responsabilidad administrativa.
De igual forma, que cada año el Estado y los Municipios asignen una partida presupuestal específica, para ejecutar el protocolo y los modelos de atención.
Asimismo destacó que el IQM, tenga la facultad para vigilar que las dependencias y entidades estatales y municipales, implementen y ejecuten correctamente dicho protocolo.
De no hacerlo, darán a las instancias sancionadoras competentes para que inicien los procedimientos correspondientes.
Destacó que si bien es cierto, tanto el Gobierno Federal como Estatal, han implementado algunos protocolos para atender ciertos casos o tipos de violencia contra las mujeres, pero normalmente se encuentran sectorizados a una institución o materia en particular, lo que impide brindar a las víctimas una atención completa y eficaz
Se pretende que con el Protocolo propuesto, se unifiquen y coordinen los procedimientos y mecanismos de atención.