Para el egresado del Foro Teatro Contemporáneo de Ludwik Margules, el reconocimiento que hoy tiene este género se debe al compromiso y arduo trabajo de los artistas especializados en este tipo de show.
“La cultura del mundo está empezando a tomar al cabaret como un género serio, como realmente es, gracias al esfuerzo que hemos puesto, a la limpieza, la investigación y todo lo que hay detrás de un espectáculo de este tipo”, aseveró en entrevista con Notimex.
César Enríquez dará este domingo su última función, en su cuarta temporada, del espectáculo Por jodidos y hocicones mataron a los actores, en el Teatro Isabela Corona.
El actor que se dedica a este tipo de teatro desde hace más de 12 años y quien ha sido becario del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes como creador escénico, reconoció que en este género en ocasiones se deja de ser riguroso, pero celebró que en México exista un resurgimiento interesante en estas presentaciones.
Dijo que, de pronto, “todo el mundo quiere hacer cabaret, pero no con el rigor con el que se debe hacer, se cree que sólo es ponerse pestañas, tacones, pelucas y salir a hablar sobre temas sexuales, pero no, debe haber un estudio previo”.
Enríquez comentó que a diferencia de años atrás en que los grandes cómicos que se forjaron en el escenario y en el teatro presentaban este género, ahora muchos son egresados de universidades: “ha sido un boom bastante interesante, porque antes al cabaret se le trababa como un subgénero y ni siquiera era considerado como un género viable”, aseguró.
Con una trayectoria que destaca por representar al cabaret mexicano en festivales nacionales e internacionales, César Enríquez consideró que hacer cabaret es hacer un homenaje a un teatro “que nos pertenece y que nos identifica como mexicanos”, en este caso, a la carpa mexicana y el teatro de revista política.
“Me interesaba mucho hablar sobre el cabaret, sobre cómo llega a este país, se ha hablado del francés, alemán, pero pocas veces del teatro de revista política y de carpa, que es un teatro que nos pertenece, que es alburero, divertido, crítico y que se ha perdido”, opinó.
Su propósito es recobrar y volver a hablar de este tipo de teatro, que fue cuna de grandes cómicos como Cantinflas, personajes como “La Guayaba” y “La Tostada” o como el actor Joaquín Pardavé.
Por jodidos y hocicones mataron a los actores se escribió luego de toda una investigación que realizó César Enríquez durante un año, sobre el teatro de revista político a través de libros y entrevistas con maestros que se dedicaban al escenario como Tito Vasconcelos.
“La información no es tan basta, yo tuve que desentrañar, encontrar libros de compañeros que tenían por ahí, ni siquiera en bibliotecas encontraba datos, fui recopilando información”, concluyó.