Denunciaron que con dicha reforma, el Colegio de Bachilleres se ha tenido que enfrentar a situaciones que atentan contra su vocación propedéutica para ingresar a estudios superiores, en perjuicio de alumnos y profesores.
En conferencia de prensa, el secretario General del Sindicato Independiente de Académicos del Colegio de Bachilleres, Arturo Mendoza Torres, aseveró que el problema que enfrenta la educación media superior con la reforma es el modelo académico que se está implementando y que ha disminuido contenidos y programas de estudio.
En su lugar, ahora se trabaja bajo una nueva modalidad “que parece ser que se refrenda con la reforma nueva de la Cuarta Transformación” y que consiste en hacer de la educación un modelo donde el objetivo va a ser “educar para la vida”.
Al respecto, aseveró que el Colegio de Bachilleres cumple con la función de ser un formador de jóvenes con carácter propedéutico, es decir, que se le están dando las herramientas para poder enfrentar un examen de admisión a nivel superior.
Sin embargo, la directiva del Colegio de Bachilleres, encabezada por Sylvia Ortega Salazar, ha manejado la idea que es mejor disminuir contenidos y profundizar aprendizajes, y bajo esa tónica comenzaron a diminuir asignaturas y contenidos en términos de horas.
Esto ha afectado a muchos egresados porque al momento de presentar sus exámenes, las probabilidades de ser admitidos son mínimas, por lo que se ha insistido a las autoridades en que entiendan que el Colegio De Bachilleres es propedéutico.
Agregó que educar para la vida ha sido un objetivo previsto dentro de las metas para el Desarrollo Sustentable 2030 como un complemento de la formación educativa.
Por otra parte, denunciaron que se han violado indicaciones del Contrato Colectivo de Trabajo del Colegio de Bachilleres, bajo el argumento de que sobre dicho contrato está la Ley General del Servicio Profesional Docente, a pesar de que con la reforma se supone que prácticamente se elimina dicha ley.
“Sin embargo, a nosotros como docentes nos aplican el CCT, nos aplican la Ley Federal del Trabajo Apartado “A”, nos aplican el Estatuto Orgánico y nos aplican el reglamento del personal académico a lo que los docentes comentan: a qué le vamos a hacer caso, agregó Mendoza Torres.
Ante esta serie de situaciones, aseveró que más bien las autoridades han implementado normatividades que se alejan fielmente de las leyes por lo menos secundarias y han impedido que los profesores que tienen base y antigüedad tengan más horas, lo cual es una transgresión.
El último caso es que se ha pasado por alto es que el único facultado para elegir al director del colegio es el presidente de la República, de manera que en febrero eligen a través de la Junta Directiva del Colegio de Bachilleres a Remigio Jarillo González.
Sin embargo, dicha junta no tiene dicha facultad, ya que la Ley de Decreto de creación del Colegio de Bachilleres, en su Artículo 9 señala que la facultad es del Ejecutivo federal.
Por todo ello, demandaron que se les tome en cuenta en las discusiones que se tienen actualmente en el tema de la reforma educativa y que se restablezca la vocación del Colegio de Bachilleres como formador de conciencias críticas bajo un perfil educativo humanístico y formal.