La sonrisa en sus rostros refleja la inocencia de los pequeños, quienes en su mayoría fueron separados de sus hermanos y de sus papás, quienes según los niños, “no quisieron venir”.
Escondidos bajo la vergüenza y enroscados en los brazos o piernas de sus madres, algunos niños sólo sonríen a los cuestionamientos, pero todos coinciden que van a Estados Unidos, un lugar que imaginan será maravilloso y prometedor.Sin saber lo que les espera al llegar a Estados Unidos, donde presuntamente ya está lista la Patrulla Fronteriza, los pequeños corren y gritan de un lugar a otro.
Dilan Mateo cumple un año este día, Dilan Gael, de 5 años, dijo que en Honduras dejó a su papá porque no quiso venirse con ellos a Estados Unidos y Alexa de 5 años dejó a su hermana mayor en su país porque tampoco quiso seguirlos, pero dice extrañarla mucho.
A Ante Alberto, de 8 años le costó un poco de trabajo dejar a sus compañeros de segundo de primaria, pues refiere que algunos de ellos ya eran sus amigos y aunque dentro de la caravana ha encontrado amigos, le hace falta su hermana mayor y su hermano de un 1 año, quienes se tuvieron que quedar en Honduras.Ante es un pequeño que como a todos los de su edad, le gusta jugar a la pelota, adora los dulces y ya quiere conocer Estados Unidos porque su mamá le ha dicho que es un lugar mucho más bonito que su país.
Ante reconoce que el trayecto ha sido muy pesado pues ha caminado bastante y no sabe hasta cuanto dejará de hacerlo, en ocasiones lo suben en un ‘bus’ como ellos le llaman, pero otras tantas tiene mucho que caminar.Lo que a Ante le motiva para seguir adelante es que su mamá le ha contado de grandes planes que tiene para ellos ahora que estén del otro lado de México, aunque el preferiría quedarse aquí porque asegura que es más bonito que su país.
Anahí tiene una hermosa sonrisa y grandes pestañas, ella pudo traerse su muñeca a la que cuida como su mamá la cuida a ella.
La pequeña, un poco tímida, cuenta que está en Querétaro para tomar un descanso porque pronto seguirán caminando hacia su destino final: Estados Unidos.
Ana, la mujer que fue atendida por paramédicos de la Cruz Roja fue dada de alta a las cinco de la mañana, pues aún no se recuperaba del legrado que le hicieron en la Ciudad de México donde perdió a su bebé de cuatro semanas.
La mujer, quien aún tiene dos niños, también busca llegar a Estados Unidos donde le pueda ofrecer a sus hijos una mejor calidad de vida.
A la fecha tres bebés han nacido en el trayecto que mantiene la caravana en México.
