Bajo intensos rayos del sol, migrantes continúan hacia el sueño americano

01 de Noviembre de 2018
Guardar
bajo-intensos-rayos-del-sol-migrantes-continuan-hacia-el-sueno-americano.jpg
bajo-intensos-rayos-del-sol-migrantes-continuan-hacia-el-sueno-americano.jpg
Lagunas, Oax., 1 Nov (Notimex).- El camino cada vez se torna más difícil y entre más pasan los días, la primera caravana de migrantes centroamericanos que buscan el sueño americano empieza a reflejar el cansancio por tanto caminar.

Provenientes del municipio de Juchitán, donde estuvieron dos días, avanzan hacia Matías Romero, con ampollas en lo pies, lastimados, enfermos y bajo los intensos rayos del sol y casi 30 grados de temperatura.

Los niños y las mujeres embarazadas se han cansado de andar, algunas pudieron subirse a algún transporte, otras, van a paso lento, pero sin perder la esperanza de poder llegar a la frontera de Estados Unidos y pedir asilo, "o mínimo" a la Ciudad de México o Tijuana para poder encontrar un trabajo.



Cada vez caminan más dispersos, ya no son grandes grupos, pese a que ayer les pidieron avanzar juntos para que el peligro fuera menor. Hay unos que van hacia este municipio en autobuses que pudieron pagar, otros de "aventón" y unos más colgados en tráileres.




Desde que salieron de San Pedro Sula, Honduras, el pasado 12 de octubre, la seguridad es lo que menos les ha interesado, y más cuando dicen estar cansados de la miseria y la violencia que se vive en sus países.

Sonia Sarahí Valentín tiene 25 años y es originaria de Santa Rosa de Copán (Honduras) y señala que se vio en la necesidad de abandonar su país porque carece de oportunidades de encontrar un empleo.

Pese a los fuertes rayos del sol no se cansa de caminar, son más grandes las ganas que tiene de llegar a Estados Unidos para intentar mejorar las condiciones de vida de su familia.

"Vengo por necesidad, porque allá cuesta encontrar un empelo, a veces no tenemos ni para la comida, peor cuando tienes hijos, tienes más necesidades y por los hijos debes ver la manera de salir adelante", dijo la mujer.

Relató a Notimex que tiene una hija de dos años, a quien dejó con su madre diabética, y es por ellas que, aunque el camino es difícil, "vamos al pie de la lucha, porque nuestra misión es llegar a Estados Unidos y salir de la pobreza en la que estamos en Honduras para prosperarnos por nuestra familia".



"No voy a abandonar el sueño, mi hija no entiende mucho pero es duro para mí dejarla, pero Dios sabe que lo hago por necesidad, somos una familia de escasos recursos", apuntó.




"No quise traerme a mi hija para no exponerla, pero yo quise venir a luchar, de Honduras salí sin ningún lempira (moneda hondureña), me salí sin nada, sólo con mi maleta de ropa y una amiga que trae dos niñas y decidimos emprender el viaje y que sea lo que Dios quiera", agregó.

Sonia dice que aveces se "agüitan" un poco y cuando eso sucede se dan ánimos entre ellos mismos para seguir adelante porque vienen con el firme propósito de llegar a Estados Unidos y salir adelante.

Archivado en