Explicó que la medida es preventiva y se abrieron 3 válvulas a través de las cuales se desfogan 20 mil litros de agua por segundo. Actualmente el vaso de captación tiene niveles de 66%; sin embargo, por el gran afluente que llegó desde San Juan del Río se registraron niveles superiores al 70%.
Señaló que, por instrucciones de la dependencia federal, se bajará el nivel de la presa a un 50% esto para prevenir posibles inundaciones en el Pueblo Mágico.
“El desfogue se ha mantenido constante desde ayer a las 3 de la mañana y se están vertiendo a través de las 3 válvulas un total de 20 mil litros por segundo. No podemos parar hasta llegar al 50 por ciento de la capacidad de la presa porque si se presenta otra corriente fuerte, como la de hace 2 días, la presa puede alcanzar el 100% de su capacidad”.
El funcionario municipal aclaró que, por el momento, no hay riesgo para población; sin embargo, se realizan trabajos de limpieza sobre el río San Juan (en el tramo de Tequisquiapan) para retirar maleza y objetos que pudieran obstaculizar el libre flujo de la corriente.
Explicó que pudiera existir riesgo para el municipio si la presa alcanza su máximo nivel y se tuvieran que verter un promedio de 70 mil litros por segundo y las zonas que se verían afectadas incluyen el parque La Pila y fraccionamientos como Claustros del Río.
“Desde que ocurrió la tragedia en San Juan del Río hemos tenido una gran cantidad de llamadas por para de hoteleros y vecinos de fraccionamientos porque saben que toda esa agua se deriva hacia la Centenario. Cuando se viene una corriente fuerte tenemos un par de horas para actuar antes de que haya afectaciones en Tequisquiapan”.
José Luis Ronquillo dijo que mantienen monitoreo sobre las presas La Llave, Constitución 1917 y los vasos de captación en Pedro Escobedo pues dichas infraestructuras hidrológicas tienen influencia sobre Tequisquiapan.