En el altar fueron colocadas imágenes religiosas, veladoras, flores, e incluso botellas con agua, como un símbolo de lo vital que carecieron los inmigrantes en el remolque en el que estuvieron encerrados sin ventilación, sin agua y a altas temperaturas.
De los 39 inmigrantes encontrados la madrugada del domingo pasado, 10 murieron y los otros 29 fueron hospitalizados, la mayoría de los cuales ya fueron dados de alta.
Las personas acuden al estacionamiento de la tienda Walmart, donde fue encontrado el tráiler, para orar por los 10 inmigrantes que fallecieron, por sus familias y por los que aún "luchan por sus vidas", según declararon a la estación de televisión KENS canal 5 de San Antonio.
"Arriesgan sus vidas como una especie de ruleta rusa porque depende del tipo de persona que los trae", dijo María García, tras señalar que el día que fueron rescatados los inmigrantes se quedará grabado para siempre en su memoria.
Contó quetiene familiares que cruzaron la frontera hacia Estados Unidos de manera similar.
"Yo sé, personalmente, que cuando la gente llega aquí, está cansada, tiene sed. Es por eso que todas las botellas de agua están ahí (en el altar) porque la gente murió sin agua, algo tan simple", lamentó.
"En la religión católica, rezamos el rosario cuando alguien muere y rezamos por nueve días", dijo García, quien espera que las familias de las víctimas en México se enteren que la comunidad de San Antonio está con ellos.
"Espero que lo vean y que sepan que sus seres queridos están siendo honrados y que sus recuerdos estarán para siempre en nuestros corazones y que rogamos por sus familias", dijo.
La Oficina del Médico Forense del condado de Bexar informó que ocho de los 10 inmigrantes que murieron ya fueron identificados, y dos permanecen sin que se conozcan aún sus identidades. Los nombres de las victimas no han sido dadas a conocer de manera oficial.