En entrevista con Notimex, el funcionario de la Secretaría de Gobernación (Segob) aseveró que derivado del cambio climático, hoy en día todos los estados y municipios mexicanos son vulnerables, en diferentes grados, de sufrir afectaciones derivadas de las precipitaciones.
“Los estados y municipios afectados en el país son todos, porque recordemos que las tormentas tropicales cuando ingresan del Pacífico o del Golfo de México a través del Atlántico, lo que se crea es una gran densidad nubosa que después se desplaza por la parte interior del país.
“Entonces, cuando hablamos que los municipios de la costa del Pacífico y el Golfo de México son los más vulnerables, quizá diga que son a los que más les llueve, pero no necesariamente son los que más afectaciones tienen”, explicó.
En este sentido, detalló que las tormentas tropicales, al ingresar primero por las costas, ocasionan que las precipitaciones sean de mayor volumen en estados como Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Tabasco y Veracruz, lo que en algunos casos puede derivar en inundaciones y deslizamiento de ladera.
Este fue el caso de la tormenta tropical “Beatriz”, la cual hace poco más de una semana provocó fuertes lluvias en Oaxaca, que dejaron deslaves, inundaciones, derrumbes y propiciaron la muerte de siete personas.
“Una simple depresión tropical que se estaciona a la orilla de algún estado nos inunda, lo acabamos de vivir con Beatriz en Oaxaca, no fue un huracán, pero se estacionó, viajaba a seis kilómetros por hora, circulando en un estado, y pues les llovió en 48 horas lo que le debió de haber llovido en meses”, explicó.
No obstante, Luis Felipe Puente destacó que en las últimas semanas, algunas de las mayores afectaciones provocadas por las lluvias se han dado en estados del interior del país, cuya altura supera los dos mil metros sobre el nivel del mar. Tal es el caso de la Ciudad de México, donde se han presentado severas inundaciones.
“Podíamos decir que llueve menos en Coahuila y en Chihuahua, pero desafortunadamente ahí tenemos las peores heladas y granizadas, y hoy con el cambio climático estamos viendo un comportamiento diferente del modelo hidrometeorológico del país.
“El cambio climático nos dice que la temperatura del mar ha subido a 30 grados y esto hace que haya mucha vaporización y crea una gran densidad nubosa tanto en el Atlántico como en el Pacifico, y los frentes fríos que vienen del norte de América hacen que esta nubosidad ingrese al país y cuando se encuentra con las partes altas provoca o lluvia, granizo y tempestades”, señaló.
Mencionó que en el caso de las zonas urbanas, las afectaciones derivadas de las fuertes lluvias radican principalmente en inundaciones propiciadas por la falta de desazolve del drenaje y por la acumulación de basura en las calles.
Mientras que las zonas serranas como la sierra de Puebla, los daños se dan principalmente por el deslizamiento de ladera.
“Recordemos el año pasado en la Sierra negra de Puebla, que está muy lejos de la costa, en la parte más alta de la montaña, cualquiera diría, oye en la parte más alta de la montaña no se inunda, pero lo que sucede es que la lluvia nos hace un deslizamiento de ladera”, puntualizó el funcionario federal.
Ante ello, hizo un llamado a la población y a las autoridades estatales y municipales, a estar pendientes de los reportes que emiten el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y las delegaciones estatales de Protección Civil.
“Si ahorita hablamos de la temporada, el número de lluvias en país ha sido menor que en otros años, eso quiere decir que se nos puede incrementar hasta después de mayo, junio y julio, y que podría pasar en septiembre y octubre, que se repita el fenómeno de ‘El niño’, entonces vamos a tener a finales de octubre diciembre una importante presencia de lluvias y tormentas tropicales”, enfatizó.
Al respecto, el subgerente de Monitoreo Atmosférico Ambiental del SMN, Martín Ibarra Ochoa, mencionó que hasta el 28 de mayo de este año, el territorio nacional ha tenido el 69 por ciento de lluvias que se esperaban hasta esa fecha, en comparación con otros años.
“Lo que hemos observado es que la lámina de lluvia ha sido de 75.4 milímetros, si está lámina de lluvia la comparamos con los últimos 30 años, la media es de 109.3 milímetros, entonces esto significa que hemos tenido un 69 por ciento de lo que normalmente llueve en lo que va del año.
“Por lo que hemos tenido un déficit de lluvias prácticamente en todas las regiones del país con excepción del noroeste del país, como lo es en Nuevo León, Tamaulipas y del sur, como Oaxaca, Guerrero y Chiapas; además, Baja California”, dijo.
Sin embargo, Ibarra Ochoa reiteró que para los próximos tres meses se espera un incremento de las precipitaciones en el centro y en el sureste del país. A la vez que en el norte de México se espera un déficit de lluvias.