México, 27 Ene (Notimex).- Un grupo de estudiantes de la Universidad Tecnológica de Querétaro (Uteq) diseñaron el prototipo de un generador de electricidad y dispensadora de agua caliente para beneficiar a las comunidades rurales.
Los alumnos de Ingeniería de Mantenimiento Industrial: Luis Enrique Escamilla Corona, Gerardo Mateos Guzmán, Ángel Vega Rangel e Ismael Villegas Iglesias, desarrollaron esta tecnología con el apoyo del programa de Nuevos Talentos Científicos y Tecnológicos del Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Querétaro (Concyteq).
El modelo consiste en una máquina que trabaja con energías renovables, cuya idea surgió ante la motivación de satisfacer las necesidades de personas que habitan en comunidades rurales, dijo en entrevista con la Agencia Informativa del Conacyt, Luis Enrique Villegas Corona.
“El prototipo consiste en una fase de almacenamiento de agua que por gravedad llega hacia un calentador solar tradicional que funciona mediante captación de rayos ultravioleta”, explicó el estudiante.
“El agua va a un tanque de almacenamiento, que también puede ser una caldera, dependiendo de las necesidades”, agregó.
Después de esta fase, el agua pasa a una bomba con el objetivo de presurizarla y mantenerla a una presión constante, lo que permite precalentar el líquido a una temperatura de 60 a 80 grados centígrados.
La siguiente fase de este proceso es el calentamiento del agua mediante una caldera de gas, que eleva el líquido a su punto de ebullición y con esto se genera el vapor que requieren los demás componentes del prototipo.
“Con el proceso de precalentamiento, la energía que requiere la caldera para poner el agua en punto de ebullición es mínima”, destacó Villegas Corona.
“El vapor generado llega a una turbina con aspas que se mantendrán en movimiento a través del vapor para la generación de energía eléctrica, la cual es captada y almacenada para su distribución”, añadió.
Luego, el vapor residual que sale de la turbina generadora de energía se regresa al prototipo a través de un condensador para que se aproveche al convertirlo de nuevo en agua, haciendo de esto un proceso continuo, explicó el estudiante.
“Nos dimos cuenta que para satisfacer la demanda de una población como la que habita en las zonas rurales, nuestro contenedor debe tener una capacidad de entre 80 y 100 litros de agua”, subrayó.
Villegas Corona mencionó que gracias al apoyo del Concyteq se logró el diseño del proyecto que tuvo un costo aproximado de 23 mil pesos, provenientes del programa de Nuevos Talentos Científicos y Tecnológicos.
En una segunda etapa se considera presentar el prototipo a empresas interesadas en el desarrollo de esas regiones del estado, comentó.
“La proyección es que alguien se fijara en nuestro prototipo para llevarlo, por ejemplo, a las zonas habitadas de la Sierra Gorda de Querétaro, que es donde más se sufre de servicios eléctricos, calentamiento de agua y distribución de energías”, resaltó.
Dijo que la idea es que las personas de estas regiones puedan acceder, en la medida de lo posible, a los beneficios que tienen los habitantes de las ciudades.