Lo anterior fue ponderado por el regidor de la comisión de Hacienda en la administración Jesús Mejía Cruz, al referir que se pudo administrar, pero sobre todo tomar las medidas de austeridad para poder salir “bien librados” los últimos meses del año sin el adelanto de participaciones.
Y es que destacó que además de la reducción de sueldos de los funcionarios de primer nivel, que incluyen al propio alcalde Guillermo Vegay a los regidores, se suprimieron los privilegios que se tenían, como son los celulares, gasolina y vehículos, que los servidores públicos acostumbraban utilizar para andar con sus familias.
“Si quieren teléfono celular cada quien tendrá que pagarlo, redujeron la gasolina y ya no hay beneficio de vehículos, que solo deberán ser para cuestiones de trabajo”.
Asimismo mencionó que de inmediato se aplicó una reestructura de personal para aprovechar las áreas de oportunidad sin duplicidades, por lo que consideró importante que pudieran concluir el año sin tener que recurrir a los “rescates financieros” o adelanto de participaciones.
“Ahora esperamos que la gente responda, que haya una buena recaudación de impuesto predial y que vea los beneficios de estos programas de apoyo”.