Expertas ponderan trayectoria teatral de José Solé

28 de Julio de 2015
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México, 28 Jul (Notimex).- Como un hombre de teatro completo que ha dado mucho más que buenas obras a la escena nacional, fue considerado el actor, director y escenógrafo mexicano José Solé, en su 86 aniversario de vida que se cumple hoy.

Solé es un intérprete del lenguaje universal, asegura la crítica y periodista de teatro Alegría Martínez, en su libro “Así es el teatro”, publicado en 2005, en la colección Periodismo Cultural del Conaculta.

En realidad es un hombre de teatro completo, que además de sus puestas en escena como director, su labor como escenógrafo, como director de actores, ha hecho un trabajo muy importante dentro del teatro nacional, porque ha fundado instituciones gracias a las cuales “tenemos sólido teatro y sólida documentación de nuestro que hacer escénico”.

En el título, Martínez se refiere en particular al trabajo escénico en dos obras emblemáticas de quien fuera director de la Compañía Nacional de Teatro: “Otelo” y “Edipo rey”.

De la primera se dijo agradecida de poder disfrutar una versión limpia, convencional, fluida y vigente como la de Solé; mientras que de la segunda, asegura que “hace que se entienda, se disfrute y duela la tragedia”.

Sobre otras facetas de su trabajo, recuerda la importancia de que José Solé creara, durante su gestión en el Instituto Nacional de Bellas Artes, la Compañía Nacional de Teatro, pues “ha sido este grupo artístico que se ha ido modificando con el avance de los años, ha tenido buenas administraciones y ha hecho partícipe a la ciudadanía de un arte escénico que sin su gestión no se habría podido ver en este país.

“José Solé también impulsó la Muestra Nacional de Teatro que cada vez está más fortalecida y tiene exponentes de todas las generaciones, entonces, realmente es una persona que ha hecho un trabajo imprescindible para nuestro teatro nacional”, destacó Alegría Martínez.

Por su parte, también en la colección de Periodismo Cultural del Conaculta, Olga Harmony escribió “Ires y venires del teatro en México” (1996), donde también se refiere a “Otelo”, ésta para ponderar la particular visión con la que fue abordada diferente a la tragedia.

Con esta versión, dijo, “Solé está corriendo un riesgo, pero al mismo tiempo clarifica el tejido total de la trama. Elige un Otelo que ya no es sólo el ingenuo guerrero despreciado por su raza, sino un hombre mayor enamorado de una Desdémona jovencísima”, describió.

La crítica reconoce la buena versión y montaje que se presenta, pues clarifica momentos importares de la obra y más en los que se refiere a los personajes, como la escena de la boda de Otelo y Desdémona que resulta de inmediato comprensible, además de reconocer el trabajo de toda la compañía.

José Solé nació en la zona de Mixcoac, en la Ciudad de México, el 28 de julio de 1929. Es actor, director, investigador y docente. Actor y discípulo de A. Monreau, estudió actuación en la Escuela de Arte Teatral (EAT) del Instituto Nacional de Bellas Artes.

Cursó la carrera de escenografía en Bellas Artes con Julio Prieto y dirección escénica con Rence Dussy. Ha dirigido todos los géneros teatrales desde infantil hasta comedia musical y ópera.

Su debut como actor fue con el grupo TEA que dirigió Xavier Rojas en 1946. Fue director del TEA de 1965 a 1969, coordinador Nacional del Teatro de 1991 a 1995, y jefe de la Dirección de Teatro del INBA de 1977 a 1987.

Durante su primera administración en el INBA formó el Centro de Investigación Teatral Rodolfo Usigli (Citru) y la Compañía Nacional de Teatro (CNT).

Como director escénico ha estado al frente de montajes como “La mujer de mi vida”, de Verneuil; “El Tío Vania”, de Chéjov; “Antígona”, de J. Anouilh; “Juguetes olvidados”, de Hellman; “Contigo pan y cebolla”, de Julio Jiménez Rueda; “Los encantos de la culpa de Calderón de la Barca”; “Medusa”, de Emilio Carballido.

“Compañero”, de Vicente Leñero; “Sueño de una noche de verano”, de Shakespeare en el 2005 con la Compañía Nacional de Teatro, entre otras.

Ha escrito dos textos titulados: “Correspondencia de movimiento” y “Creación colectiva, fórmula para el nuevo teatro”.

En el 2008 recibió la Medalla de Oro de Bellas Artes por su trayectoria artística; en el 2012 dirigió la puesta en escena “El arrogante español o Caballero de milagro”.

El año pasado asumió la presidencia honoraria de Centro Teatral de la Organización de las Nacioñnes Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y recibió la Medalla Cervantina.

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