Antonio Fernández Ros presentará la pieza "Hablo, luego existo"

México, 20 Mar. (Notimex).- Basada en los sonidos de 35 lenguas indígenas, el compositor mexicano Antonio Fernández Ros presentará su creación "Hablo, luego existo" para soprano y pista electrónica, en función programada esta tarde en la Plaza de Santo Domingo, ubicada en el Centro Histórico de esta ciudad.

En entrevista telefónica con Notimex, Fernández Ros indicó que esta presentación forma parte del programa del 30 Festival Centro Histórico México, además el próximo sábado llevará esta propuesta al Museo Diego Rivera-Anahuacalli.

"Aprovechando que durante estas fechas está el festival le propuse a la directora Cristina King que presentáramos la obra dentro del encuentro cultural y accedió, por lo que se presenta primero en el Centro Histórico y el sábado en el museo", dijo.

El compositor explicó que el título de la pieza "Hablo, luego existo" se relaciona al hecho de que es a través del lenguaje como uno adquiere primero conciencia, tanto de uno mismo como de los demás.

"Es una obra totalmente basada en el sonido de la voz y de la voz cantada. Es una pieza para soprano y pista electrónica, donde la intérprete Carmina Escobar canta en vivo", explicó Fernández Ros.

Subrayó que la pista electrónica está conformada exclusivamente de sonidos surgidos de la voz humana, unos reproducidos tal cual y otros alterados digitalmente, pero el componente principal de la pista es que son testimonios de 35 lenguas indígenas habladas en México.

"La pieza hace un recorrido gradual a través de todo el proceso de la gestación del lenguaje. La obra inicia con sonidos de respiración, después se pasa a la aparición de las vocales, luego a las consonantes y de ahí a las sílabas, para llegar a las palabras y por último a las oraciones, que es el componente más complejo del fenómeno que se conoce como lenguaje hablado", afirmó el compositor.

Aclaró que la soprano Carmina Escobar deja a un lado el bel canto, para hacer ruidos vocales hasta canto tradicional o melódico, por lo que va desde reproducir su respiración, ruidos de extracto vocal, vocales y consonantes aisladas hasta sílabas, palabras y oraciones.

"Al final de todo el producto quedé muy contento con él, porque la interacción con la pista electrónica y la soprano es bastante afortunada", apuntó Fernández Ros.

Gracias al apoyo del Instituto Nacional de Bellas Artes, el compositor mexicano recibió una beca Epro Música para realizar la pieza "Hablo, luego existo".

Nacido en la Ciudad de México, Antonio Fernández Ros estudió composición en la Escuela Nacional de Música. Obtuvo la licenciatura en composición en el Mannes College of Music de la ciudad de Nueva York, y realizó estudios de posgrado en la City University of New York.

Mediante una beca del gobierno francés hizo una especialización en música por computadoras y nuevas tecnologías en París, donde trabajó en el IRCAM, en el GRM y con I. Xenakis en la Sorbona.

Fue coordinador del Laboratorio de Música por Computadoras de la Escuela Nacional de Música. Ha recibido la beca para Jóvenes Creadores y el apoyo a coinversiones por parte del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes de México, y fue acreedor de una beca de la Fundación Rockefeller.