Rinden homenaje a José Guadalupe Posada con exposición en Nicaragua

Managua, 1 Nov. (Notimex).- La exposición "La muerte tiene permiso", de José Guadalupe Posada (1852-1913), será inaugurada hoy en el Centro Cultural Antiguo Convento de San Francisco, en la ciudad colonial de Granada, en el litoral del Pacífico de Nicaragua.

Dividida en cinco núcleos temáticos, la exhibición muestra el apego de México por lo mortuorio, a través de los grabados e ilustraciones de Posada, a quien se le rinde homenaje a propósito de la celebración del Día de Muertos, informó la Embajada de México en Nicaragua.

Los grabados muestran calaveras elegantemente vestidas y otras listas para asistir a fiestas de vecindad, de las calles y de la alta sociedad. El título de la muestra surgió de uno de los cuentos de Edmundo Valadés (191-1994).

"La muerte tiene permiso" facilita la contemplación de las estampas aisladas y piezas artísticas del connotado grabador, además de contribuir al disfrute de alguna de ellas dentro del contexto original en que fueron publicadas.

La exposición, con entrada gratuita, es copatrocinada por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) de México, la Embajada de México en Nicaragua, el Instituto Nicaraguense de Cultura y el Convento de San Francisco.

Originario de San Marcos, Aguascalientes, José Guadalupe Posada difundió su trabajo en la prensa diaria, con ilustraciones para noticias, caricatura política e imágenes para publicaciones de empresas comerciales.

Como parte de su actividad destacan las "hojas volantes" con los sucesos de último momento, publicadas después de la emisión diaria del periódico.

En ese formato, se distribuyeron las "calaveras literarias", algunos corridos y otros textos llamados "ejemplos", cuyo objetivo era proporcionar enseñanzas morales.

Posada estuvo presente en la cotidianidad de finales del siglo XIX y principios del XX, gracias a los diversos encargos por los que la gente acudía a su taller.

Su trabajo incluye invitaciones a eventos sociales, esquelas funerarias e imaginería religiosa.

El autor colaboró con impresores de gran talla, como Antonio Vanegas Arroyo (1850-1917) y Francisco Montes de Oca (1837-1885), y ofreció sus dibujos para panfletos.