Xi Jinping, discreto liberal de sangre revolucionaria

14 de Marzo de 2013
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Pekín, 14 Mar (Notimex).- Nacido en el seno de una familia revolucionaria en junio de 1953, Xi Jinping, quien fue elegido hoy presidente de China, es hombre discreto y de corte liberal.

El sucesor de Hu Jintao tiene experiencia como administrador en las regiones más prósperas de China y mantiene conexiones con el Ejército, varias de cuyas unidades ha visitado desde el pasado noviembre, cuando llegó al liderazgo del gobernante Partido Comunista de China (PCCh).

Ingeniero químico por la Universidad de Tsinghua, donde se educan la mayoría de dirigentes chinos, Xi nació en la provincia de Shaanxi -cuya capital es Xian- y se unió a las filas del PCCh en 1974.

Hijo del general y héroe revolucionario Xi Zhongxun, Xi ha vivido desde pequeño entre las bambalinas del poder, especialmente después de que su padre fue nombrado viceprimer ministro y su familia se trasladó a Zhongnanhai, la residencia de los altos mandos del Partido y el Estado, durante los primeros años de la China comunista.

A pesar de su "sangre revolucionaria", lo que hizo de él un candidato óptimo al máximo liderazgo para las diversas facciones del PCCh, su pasado está marcado por la época maoísta, como casi todos los chinos de su generación, ya que su padre cayó en desgracia en 1962 ante el "Gran Timonel" y fue purgado.

El joven Xi, de quien se dice que es un hombre discreto, liberal en lo económico, ferviente comunista y muy ambicioso, fue enviado en la década de 1960 al campo, concretamente a Liangjiahe, en su provincia natal, a trabajar como campesino durante algunos años de la Revolución Cultural (1966-1976).

La rehabilitación de su padre tras la llegada de Deng Xiaoping al poder en 1978 permitió que los Xi recuperaran la influencia de antaño, al tiempo que el joven Xi, actualmente casado por segunda vez tras un breve matrimonio infructuoso, se labraba una carrera política en las ricas regiones del sureste (Fujian, Zhejiang, Shanghai).

Sus cargos más importantes antes de acceder al Comité Permanente del Politburó y a la vicepresidencia del Estado en 2008 han sido los de secretario del Partido en Fujian, Zhejiang y Shanghai, además de mantener siempre estrechos lazos con el Ejército chino, lo que le valió la vicepresidencia de la Comisión Militar Central el mismo año.

Casado con la célebre cantante Peng Liyuan, Xi ha tenido todos estos años reputación de hombre incorruptible y trabajador que -en ocasiones como la de 2007, cuando sustituyó al jefe del PCCh en Shanghai caído en desgracia, Chen Liangyu- ha sido utilizado para resolver problemas al más alto nivel.

Durante los últimos cuatro años ha realizado varias giras internacionales, con el objetivo de presentarse como futuro líder ante las principales potencias.

En 2009 visitó México, cuando dijo que "algunos extranjeros con la tripa llena no tienen nada más que hacer que acusar a China".

Es un protegido de la llamada "facción de Shanghai", liderada por el ex presidente Jiang Zemin, y que representa los valores liberales en la economía, pero manteniendo las riendas del poder.

Se cree que fue el principal encargado de la organización de los Juegos Olímpicos de Pekín de 2008, de los que se le responsabilizaron para probar sus capacidades de líder.

Algunos expertos le atribuyen la negociación entre facciones para solventar la mayor crisis interna del PCCh en décadas: el "caso Bo Xilai".

Pese a sus supuestas credenciales de hombre contrario al enriquecimiento a toda costa de algunos sectores de la sociedad china y las críticas a la corrupción dentro del Partido, el último año se conoció que sus familiares han amasado grandes fortunas.

En un reportaje de investigación de la agencia Bloomberg, se aseguraba a mediados de 2012 que la familia de Xi en especial su hermana mayor, dispondría de una fortuna de más de 350 millones de dólares, entre propiedades en Hong Kong, participaciones en empresas de tierras raras y telecomunicaciones.