Cancún y la Riviera Maya no serían realidad sin labor de albañiles

Cancún, 3 May 15 (Notimex).- Cancún y el corredor turístico hasta Tulum, que contempla cerca de 120 kilómetros de playa y 80 mil habitaciones hoteleras, difícilmente se podrían explicar sin el trabajo de los trabajadores de la construcción, explican autoridades municipales.

El ex alcalde de Cancún, Rafael Lara y Lara, uno de los primeros funcionarios federales que llegaron a la zona para participar en su desarrollo, no duda en elogiar y destacar la aportación de los alarifes que este día conmemoran el "Día de la Santa Cruz".

Empero, pese a que la industria de la construcción es el segundo sector más importante de Quintana Roo, también es uno de los más desprotegidos por la ley, ya sea en materia laboral o de seguridad social, reconoce el titular del Sindicato de la Industria de la Construcción (Sitec), José Juan Chilón Colorado.

"El principal problema que enfrentan los albañiles es que no tienen el apoyo de algún sindicato que cuente con un contrato colectivo o que los puedan apoyar", expresa al explicar que muchos de los alarifes que trabajan en este destino no pertenecen a la central obrera que él representa.

De hecho, el sector de la construcción atraviesa por momentos difíciles, miles de albañiles se quejan por la falta de trabajo, y que además, cuando existe, los salarios son ínfimos, ya que los contratistas e intermediarios les condicionan el pago a 150 pesos por todo un día de trabajo.

Al respecto, trabajadores de la construcción lamentan que indocumentados de países centroamericanos los están desplazando por aceptar pagos muy por debajo de lo que está establecido en el marcado, aún cuando no tienen los conocimientos ni la experiencia en el ramo.

En entrevista, el delegado federal del Trabajo en Quintana Roo, Enoel Isaías Pérez Cortez, precisó que la dependencia mantiene operativos constantes para identificar este tipo de trabajadores con estatus no legal, pero este tipo de personas es ubicada sólo hasta que haya algún accidente en el que estén involucradas.

En el marco de la conmemoración del día de la Santa Cruz o día de los Albañiles, Rafael Lara y Lara retoma la conversación con Notimex y sostiene que Cancún, como parte de ese “gran laboratorio” en el que se convirtió, es un ejemplo en materia de construcción.

Afirmó que fue de los primeros lugares en los que se desarrollaron obras en dunas, en la laguna, en manglares y que siempre los albañiles estaban al “pie del cañón”, en espera de órdenes.

"Mucho de lo que se hace, o ya no se hace en materia de construcción, empezó en Cancún", refiere convencido, quien fuera edil de este, el principal destino turístico de playa de México.

Reconoció que en el desarrollo de Cancún se cometieron muchos errores, algunos de los cuales, por fortuna, aún pueden corregirse y que sirven o son ejemplo en el crecimiento de la Riviera Maya, y su corredor turístico.

En el marco de las celebraciones del día de la Santa Cruz o día de los Albañiles, agregó que la ciudad era inicialmente un lugar de construcción que luego se volvió hotelero y turístico y que durante ese proceso, los cientos y luego miles de obreros se convirtieron en meseros, jardineros, y las mujeres en camaristas.

Sostiene que desde sus inicios, Cancún le ha dado trabajo a miles de empleos a yucatecos, campechanos, chiapanecos y a gente de todo el país y el extranjero, pero que sin duda los trabajadores de la construcción ocupan un lugar muy especial.

"Miles de hombres y mujeres han construido las bases para consolidar a la industria sin chimeneas, esos albañiles que ahora son garroteros, bar tenders, meseros, taxistas, maleteros, guías de turistas, que se aventuraron por primera vez a vivir en los campamentos, donde tener energía eléctrica era un lujo", recuerda.

Insiste que Cancún no se entendería sin su infraestructura de lujo, bares, discotecas, restaurantes de talla mundial y que todo inicia con la cadena de construcción.

Recuerda que entre 170 y 200 trabajadores llegaron en 1970 a lo que es hoy Cancún, quienes tuvieron que construir un campamento y obras provisionales de luz y agua para los nuevos pobladores.

En entrevista aparte, Chilón Colorado comentó que se calcula que el número de trabajadores de la construcción en Quintana Roo se mantiene actualmente entre 95 y 120 mil y que la cifra podría aumentar, pues de acuerdo con los nuevos proyectos para 2015, se generarían entre 40 y 70 mil más.

Refiere que la cifra se mantiene a la alza pues por ejemplo en 2005 el número trabajadores de la construcción se mantenía en 285 mil, pero tras el paso del huracán, Wilma, dicha cifra bajó hasta 70 mil, por ello creen que para 2015 podrán recuperar hasta 70 mil nuevos empleos.

"Para 2015 tenemos la intención de recuperar de 40 a 70 mil empleos en todo el año, esa es la expectativa; hay que recordar que después del huracán Wilma aumentaron las contrataciones, pero después fueron bajando", expresó.

Mientras tanto, la zona del Crucero, en el centro de la zona urbana, concentra, como desde 1970, a los trabajadores de la construcción que buscan un empleo.

En ese lugar, desde las primeras horas del día aparecen los trabajadores o aspirantes a ocupar un lugar en cualquiera de las obras en marcha. Dos de ellos hablaron para Notimex: