El diseño de las piezas inició hace poco más de un año y de acuerdo con Sergio Sánchez López, director de la compañía, se buscaron diferentes proveedores para fabricar la estructura de fibra de carbono y fue hasta China en donde encontraron mejores costos y calidad en la fabricación. Señaló que el resto de los componentes electrónicos provienen de Estados Unidos y países europeos.El empresario explicó que esta es la primera unidad de diez que estarán fabricando a solicitud de la dependencia federal y que deberán ser entregados antes de que concluya 2016.
Por si mismo el dron tiene un peso de 14 kilogramos; sin embargo puede hacer una carga útil máxima de 20 kilogramos, incluyendo baterías y cámaras, una de las cuales tiene la capacidad para detección de calor.
“Es un dron de vigilancia que también puede ser utilizado para incursiones en operativos, fue fabricado a solicitud de la Comisión Nacional de Seguridad. El equipo será entregado a una dependencia federal que puede ser la Policía Federal o el Cisen, no sabemos realmente hasta donde va a bajar el equipo para que lo estén operando, también hicimos un trabajo para formar capacitadores en el vuelo de drones para las autoridades federales. Es uno de 10 equipos que estarán operando en todo el país”.
Sánchez López dijo que por los casi un millón de pesos APPDrones incluyó el equipo, capacitación, una estación de tierra especializada, un dron de práctica.
“El equipo se diseño en San Juan del Río, en conjunto con una ingeniero de Monterrey, diseñamos el equipo y toda la fibra de carbono se maquiló en China, mientras que la electrónica es de otros países”.
Reconoció que en México todavía no existe una regulación en lo que refiere a la fabricación; sin embargo, manifestó que la Secretaría de Comunicación y Transportes (SCT), sí impulsa algunas reglamentaciones para su vuelo.
Enfatizó que un dron es una herramienta y ante la posibilidad de que pueda ser mal empleado, consideró importante que las dependencias federales actualicen la normatividad.
“Como se trata de una nave no tripulada, no se requiere de algún permiso, la única licencia que tenemos es para la distribución y manejo de la cámara termográfica, la cual es de uso exclusivo de las fuerzas armadas. Lo ideal es que se reglamentara y se federara para que como fabricantes nos podamos proteger”, finalizó.