Bogotá, 20 Jul 14 (Notimex).- El Festival Internacional de Poesía de Medellín, que se inauguró en el Teatro al Aire Libre del cerro Nutibara, con 73 poetas de 39 países, es un homenaje a los pueblos indígenas del mundo y un espacio de apoyo a los diálogos de paz con la insurgencia, que se llevan a cabo en La Habana, Cuba.
El encuentro cultural arrancó con la lectura de poemas del mexicano Juan Gregorio Regino, Horacio Benavides (Colombia), Oumar Farouk Sesay (Sierra Leona), Ivo Svetina (Eslovenia).Además estuvieron Metin Cengiz (Turquía), Isztván Turczi (Hungría), Joséphine Bacon (Canadá, Nación Innu), Amin Khan (Argelia), Luo Ying (China), Gcina Mhlophe (Suráfrica), y Joy Harjo (Estados Unidos, Nación Muskogee).
El acto de la inauguración que se extendió desde la tarde y hasta la noche del sábado, en el imponente Cerro de Nutibara, en el corazón de la ciudad de Medellín, cerró con un concierto de la rockera colombiana Andrea Echeverri (Colombia).
El festival fue convocado por la revista “Prometeo” para hacer una celebración de la tierra con los pueblos indígenas, explicaron los organizadores.
Este encuentro poético mundial se configura como “un evento constructivo en respaldo de los diálogos de La Habana y de los esfuerzos por el mutuo entendimiento y coexistencia pacífica, en un tiempo de graves conflictos y tensiones en muchos lugares neurálgicos del planeta”.
“Tras una guerra de más de medio siglo que ha dejado cientos de miles de muertos, heridos, lisiados y desaparecidos, Colombia necesita y merece una paz justa, con democracia política, económica, social y cultural”, señaló la revista “Prometeo” en un comunicado.
Agregó que “justamente procesos culturales democráticos multitudinarios los que pueden fortalecer y hacer irreversible un clima de diálogo, de paz y reconciliación nacional”.
Este festival fue galardonado con el Premio Nobel Alternativo hace ocho años en el Parlamento de Suecia por “probar que la creatividad, la belleza, la libre expresión y la comunidad pueden florecer y superar incluso los temores más profundamente afianzados, así como la violencia”.
El acto de la inauguración que se extendió desde la tarde y hasta la noche del sábado, en el imponente Cerro de Nutibara, en el corazón de la ciudad de Medellín, cerró con un concierto de la rockera colombiana Andrea Echeverri (Colombia).
El festival fue convocado por la revista “Prometeo” para hacer una celebración de la tierra con los pueblos indígenas, explicaron los organizadores.
Este encuentro poético mundial se configura como “un evento constructivo en respaldo de los diálogos de La Habana y de los esfuerzos por el mutuo entendimiento y coexistencia pacífica, en un tiempo de graves conflictos y tensiones en muchos lugares neurálgicos del planeta”.
“Tras una guerra de más de medio siglo que ha dejado cientos de miles de muertos, heridos, lisiados y desaparecidos, Colombia necesita y merece una paz justa, con democracia política, económica, social y cultural”, señaló la revista “Prometeo” en un comunicado.
Agregó que “justamente procesos culturales democráticos multitudinarios los que pueden fortalecer y hacer irreversible un clima de diálogo, de paz y reconciliación nacional”.
Este festival fue galardonado con el Premio Nobel Alternativo hace ocho años en el Parlamento de Suecia por “probar que la creatividad, la belleza, la libre expresión y la comunidad pueden florecer y superar incluso los temores más profundamente afianzados, así como la violencia”.